Asociación, Asuntos humanitarios y climáticos, Américas

Matronas haitianas:  Prestación de servicios cruciales de SSRMNIA durante una crisis humanitaria 

ICM
7 febrero 2025

Hace casi un año que la situación sociopolítica y de seguridad de Haití se deterioró drásticamente. Al perder el gobierno el control sobre el territorio nacional, los grupos armados se han apoderado de amplias zonas del país, sobre todo en la capital, Puerto Príncipe. Esta inestabilidad ha afectado profundamente a todos los aspectos de la vida en Haití, incluida la salud sexual, reproductiva, materna, neonatal, infantil y adolescente (SSRMNIA). 

Una crisis con graves consecuencias sanitarias 

La infraestructura sanitaria de Haití, ya de por sí frágil, se ha resentido considerablemente. Muchos hospitales han sido destrozados o cerrados, dejando a miles de mujeres y adolescentes sin acceso a la atención esencial. Los servicios del SSRMNIA, que ya eran limitados, se han vuelto casi imposibles de acceder en ciertas zonas, poniendo aún más en peligro la salud y el bienestar de las mujeres y las niñas. 

Los campamentos provisionales se han convertido en el hogar de muchas familias desplazadas, pero estos refugios carecen a menudo de recursos básicos. Como suele ocurrir en este tipo de lugares, las mujeres y las niñas son más vulnerables a la violencia sexual, los embarazos no deseados y las infecciones de transmisión sexual. 

Las matronas en el centro de la respuesta humanitaria 

En respuesta a estos retos, nuestra asociación miembro, la Asociación de Matronas de Haití (ASFH, por sus siglas en francés), se ha aliado con la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF, por sus siglas en inglés) para lanzar la iniciativa “Stream 3: Respuesta Humanitaria de Emergencia”. 

Esta campaña despliega clínicas móviles en cuatro campamentos de refugiados, prestando atención directamente a las poblaciones más vulnerables. Estos servicios incluyen: 

  • Consultas prenatales y ginecológicas: garantizando a las mujeres embarazadas un seguimiento médico adecuado y la detección temprana de posibles complicaciones. 
  • Pruebas de detección del VIH, la sífilis y otras enfermedades de transmisión sexual: las cuales son fundamentales para prevenir y tratar infecciones que podrían poner en peligro la salud de las mujeres y sus parejas. 
  • Prevención de embarazos no deseados: permitiendo la distribución de preservativos y suministro de métodos anticonceptivos a corto y largo plazo para que las mujeres puedan tomar decisiones informadas sobre su salud reproductiva. 
  • Remisión de casos de violencia de género: permitiendo la conexión de las sobrevivientes de violencia de género con los servicios de apoyo adecuados, incluido el apoyo psicológico. 

Estas clínicas móviles atienden necesidades urgentes a la vez que devuelven el sentido de dignidad y seguridad a mujeres y niñas. 

El papel esencial de las matronas 

Durante las crisis, las matronas suelen ser las únicas profesionales sanitarias accesibles para las mujeres y niñas en zonas remotas o de alto riesgo. Su experiencia en la atención a la SSRMNIA las hace indispensables en los esfuerzos humanitarios. Más allá de la atención médica, las matronas proporcionan apoyo emocional y psicosocial, ofreciendo seguridad en entornos donde las mujeres y las niñas se sienten especialmente vulnerables.  

Las matronas salvan vidas, reducen las complicaciones y defienden los derechos fundamentales de las mujeres y las niñas. Su presencia garantiza la continuidad de los cuidados críticos, incluso en las circunstancias más difíciles. 

Llamado a la solidaridad internacional 

La respuesta de la ASFH ha sido impactante, pero es esencial más apoyo. Los recursos materiales y financieros siguen siendo limitados, y las matronas trabajan a menudo en condiciones extremadamente difíciles. La comunidad internacional debe intensificar sus esfuerzos para mantener estas iniciativas y garantizar el acceso a los cuidados de SSRMNIA en Haití. 

La situación en Haití exige atención urgente. Apoyar a las matronas y su trabajo es un paso crucial para mejorar los resultados sanitarios y salvaguardar la dignidad y los derechos de las mujeres y las personas con diversidad de género durante esta crisis.